Nuestra Historia

RESEÑA HISTORICA DE LA SOCIEDAD DE SOCORROS MUTUOS “ARTURO PRAT” DE CAUQUENES

Un solo ideal y un solo espíritu inspiran los movimientos mutualistas: hacer de la mutualidad la fuente más digna de cooperación y de ayuda mutua, el esfuerzo más noble de auxilio colectivo y la seguridad de procurar un servicio oportuno, eficiente y completo.

Con seguridad este fue el ideal que animó a aquel grupo de 7 visionarios que, hace 114 años, dieron origen a la Sociedad de Socorros Mutuos “Arturo Prat” de Cauquenes.

Si queremos referirnos al mutualismo cauquenino, obligatoriamente deberemos remitirnos al 21 de Mayo de 1907. Fue en la tarde de ese día que un grupo de cauqueninos, reunidos en la casa habitación de los señores Rojas y Hernández, ubicada al costado norte de la Plaza Independencia (hoy de Armas), lo que corresponde a parte de la superficie ocupada por la I. Municipalidad de Cauquenes, acordaron su creación.

Los gestores del mutualismo cauquenino fueron: Don Querubín Hernández, su primer secretario, y los señores Federico Díaz, Pedro de la Barra, Salomón Quezada, Hermógenes Cisternas y Francisco Cifuentes.

La semilla sembrada por estos visionarios pronto comenzó a dar sus frutos: empleados, industriales, agricultores, comerciantes y obreros fueron incorporándose paulatinamente a ella, atraídos por su doctrina e ideario, con el cual se identificaron y empezaron a promover entre sus familiares y amistades.

De este modo se gestó el mutualismo cauquenino y empezó a escribirse la historia de esta centenaria institución que es la Sociedad de Socorros Mutuos Arturo Prat de Cauquenes, que tanto ha beneficiado a sus hijos.

La vida de esta Institución está llena de hechos y acontecimientos que la enorgullecen. Hoy su Sede Social, construida con el esfuerzo de todos sus socios se yergue majestuosa a pocos pasos de la Plaza de Armas, desde donde, con tranquilidad, contempla su pasado, labora su presente y escruta confiada su futuro, que se vislumbra imperecedero y fructífero.

En sus comienzos, la Sociedad de Socorros Mutuos “A. Prat” fue una institución formada exclusivamente por varones. Sólo 57 años después de su fundación – el 07 de noviembre de 1964 – la Junta General de Socios, a proposición del Directorio de la época, acordó la incorporación de la mujer como socia activa.

Las primeras socias activas fueron las señoras Ida Novoa de Landeros, Tomasa Agurto de Torres, Matilde de la Vega de Rubilar, Angelina Medina de Yáñez, Yolanda Molina de Monsalve, Silvia Sánchez de Sánchez y Ana Ayala de del Rio.

Con el transcurrir del tiempo más damas fueron incorporándose a la institución. Dieciocho años después – el 21 de mayo de 1982 – se crea oficialmente el Centro Femenino “Carmela Carvajal de Prat”, instancia dependiente del Directorio Central destinada a ofrecer un espacio permanente para el desarrollo y las inquietudes propias de las damas mutualistas, asociadas a los principios y valores que orientan el quehacer de la Institución.

Su primer directorio estuvo constituido por las siguientes socias: Presidenta, Sra. Ida Novoa Quevedo; Vicepresidenta: Sra. Olga I. Lara Orellana; Secretaria: Srta. Rosa Aravena Espinosa; Tesorera: Srta. Marta Canales Torres; Directoras: Sras. Angélica Agurto López y María Angélica Rios Peña.

La incorporación de la mujer como socia activa, con deberes y derechos, constituye el hito más importante que ha tenido la Sociedad durante su larga y fructífera existencia.

 Como modelo y pionera en nuestra provincia en el quehacer mutualista, la Sociedad de Socorros Mutuos “Arturo Prat” contribuyó a la formación de varias sociedades afines. Incluso con ellas se creó una extinta Federación Provincial Mutualista que funcionó en su seno. Sin embargo, las demás, por no tener sede propia fueron desapareciendo debido a la inercia, dejación e inoperancia de sus integrantes.

La Sociedad de Socorros Mutuos “Arturo Prat” de Cauquenes es la única en su género que, actualmente, existe en la provincia y en cuanto a sede social y organización es una de las mejores en el país.

Digno de destacar es el hecho que esta Institución se ha valorado materialmente sólo con el trabajo y modesto aporte de sus asociados. Su cómoda sede cuenta con salones y dependencias adecuadas para su buen desarrollo y convivencia social.

La historia da cuenta de diversas actividades que han funcionado bajo el alero de esta institución. Entre ellas merecen destacarse: una escuela Nocturna, una estudiantina que alegraba sus fiestas; un Policlínico de Primeros Auxilios, equipos deportivos de Rayuela, de Básquetbol y de Pesca y Caza y  Conjunto Folklórico. En la actualidad funciona el Centro Femenino “Carmela Carvajal de Prat” y el Club de Adulto Mayor “Esmeralda”.

La ayuda mutua que otorga a sus asociados es un campo inagotable que justifica su existencia. Si bien ella es modesta y está regulada estatutariamente, contribuye en parte, a mitigar necesidades de quienes hoy se cobijan  bajo su alero fraterno.

Muchos han sido los hombres y mujeres que a través del tiempo han bregado en pos de la misión que esos visionarios concibieron para la Institución en 1907. A la lista de sus fundadores se suman los nombres de Heráclito Zapata, Alejandro Tapia, Luis Rubén Aguilera, Víctor López, Ismael Espinoza, Domingo A. Bustos, Feliciano Riquelme, Oscar del Pozzo, Hipólito Salgado, Juan Landeros Osorio, Luis A. Landeros Osores, Mario Matus Aedo, Juan Inzunza Valdés, Patricia Yáñez Monje, Gladys Pérez Faúndez , Jorge Gaete Letelier, Jorge Rojas Luna y Cristian González Garrido.

Cada uno de ellos, acompañados de sus respectivos Directorios han puesto sus talentos y voluntades al servicio de esa misión. Cada cual y en su época, ha puesto su sello personal a acciones de distinta naturaleza, que han derivado en significativos avances en el desarrollo institucional.

Las bases legales, administrativas y de infraestructura que caracterizan a la Sociedad de Socorros Mutuos “Arturo Prat” de Cauquenes en el presente, permiten avizorar un desarrollo aún más relevante en el ámbito social, de manera tal que la solidaridad, la fraternidad y la ayuda mutua – pilares fundamentales de la razón de ser del Mutualismo – se encarnen con más fuerza en todos quienes adhieren a esa doctrina y en la cual han visto la senda propicia para desarrollar su vocación humana.

Aporte del Insigne consocio Juan Insunza Valdés